Mi amiga Ángela trabaja como enfermera y me cuenta que el departamento de ella estaba lleno ayer. Que los doctores operaron hasta las 3 de la mañana. Fracturas. Por montones. La gente llegó tarde al trabajo, muchos niños no fueron al colegio.
Verglace. Ese es el nombre. La météo anuncia que va a caer verglace. No estoy seguro de que caiga. Lo que se me ocurre es que cae agua, pero por culpa de que la temperatura está alrededor del cero, esta agua se congela. En el suelo. Resultado: pistas de patinaje por todos lados.
La fortuna me acompañó. Un poco. Bajé las escaleras de mi casa (unos 6 escalones construidos con cemento) y fui a botar algo de basura y a sacar el reciclaje. Cuando ya estaba abajo y a punto de ejecutar mi tarea pasó como suele pasar. Uno no se da cuenta hasta que ya va en el aire. Caí estrepitosamente sobre mi costado izquierdo. Pierna, cadera, tal vez el brazo, no estoy seguro pero parece por los dolores que amanecen hoy conmigo.
¿Por qué un poco de fortuna? Pues sólo cuando estaba en suelo caí en cuenta de que algo pasaba. Y por supuesto tratando de ponerme en pie descubrí que alguien le había puesto jabón al piso o algo así. Fui afortunado porque pude haber caído bajando las escaleras. También estaban jabonosas pero sólo lo constaté cuando regresaba a la casa.
Camino al paradero pude ver cómo los carros patinaban tratando de arrancar. Y cómo la mayoría de los conductores tenía que frenar varias decenas de metros antes de lo acostumbrado.
Es la etapa bonita. La del principio del chiste del canadiense. Cuando la nieve parece bonita. Cayó un poco el 30 de octubre cuando le festejábamos a Victoria sus 2 años. Otro poco ayer y hoy ya definitivamente. Está nevando y el sentimiento es chévere. Como al principio del chiste, claro está.
Me ha dado por la verraca nostalgia. Especialmente por recordar la gran cantidad de amigos que hice durante el proceso o los que conocí luego a medida que fueron llegando. Pero la nostalgia es por los ingratos. La inmensa mayoría. Uno no sabe si era que antes era sólo hipocresía o interés o ambas o si fue que el proceso destruyó las amistades. No sé si alguna vez les conté que incluso algunos amigos me culparon de su “infortunio”, al descubrir que Canadá no era lo que pintaban o lo que uno mismo pintaba en su mente. En fin. Por esas me ha dado estos días.
Sumado a la decisión de cambiar de empleo. Me mamé. Yo creo que para eso uno es adulto. Para desear cosas y hacer que pasen. He decidido entonces, que empiezo la búsqueda de mi nuevo empleo. Son ya 3 años en el mismo sitio y definitivamente no hago lo que me gusta. Mejor dicho no me gusta lo que NO hago en mi trabajo en McGill.
Voy, entonces, a tratar de documentar mi proceso de búsqueda y de esa forma echar una manito a los que están en las mismas. Voy a tratar de ser tan detallado como me sea posible. El plan, las técnicas, las páginas, etc.
Muchos de los amigos que llegaron por mi época andan como yo en lo de la ciudadanía. He estado estudiando muy juicioso. Leyendo el libro, por supuesto, pero también haciendo muchos test de los que hay en línea. Les dejo algunos links, de los miles que hay disponibles:
http://www.v-soul.com/onlinetest/
http://www.yourlibrary.ca/citizenship/
http://www.apnatoronto.com/canadian-citizenship-quiz.html
No le paren bolas sin les salen preguntas sobre Colombia Británcia u Ontario. Por supuesto que no tienen que saber sobre eso, a menos que vivan allí.